Este proyecto esta ubicado en el centro de Bogotá, en un sector que sufre muchos problemas de pobreza, drogadicción, prostitución, y abuso intra-familiar. Se fundó por una señora que llegó al barrio y convirtió el primer piso de la casa en un centro para la comunidad, pero trabajan con 50-60 niños y jóvenes cada día. Les ofrecen un almuerzo y actividades integrales desde salud hasta deportes para que los niños de la comunidad tengan un lugar seguro para pasar su tiempo en vez de estar en la calle.
Trabajan también con las mamás que muchas veces viven con parejas violentas.
Estarías involucrado en todos los aspectos del proyecto cada día desde servir el almuerzo hasta leer con los niños. La educación incluye la educación cristiana y la oración con los niños.